FISIOTERAPIA EN LA LACTANCIA Y CÓLICOS
FISIOTERAPIA EN LA LACTANCIA Y CÓLICOS DEL LACTANTE
¿Tu bebé llora mucho y no sabes por qué? ¿Le cuesta dormir?
¿Crees que tu bebé tiene cólicos del lactante?
¿Tu bebé tiene estreñimiento, gases o vomita en casi todas las tomas?
La Fisioterapia Pediátrica puede ser de gran ayuda en estos casos para los bebés y sus familias, realizando una valoración y tratamiento adecuados para cada situación.
Cólicos del lactante
“Mi bebé no para de llorar por las noches, no hay manera de calmarlo, está muy irritado y tiene la barriguita hinchada. ¿Qué le pasa?"
Esto es lo que observan las familias cuando acuden con sospechas de que su bebé tenga “cólicos del lactante”, o bien, vienen derivados desde el pediatra para ser tratados con fisioterapia.
El cólico del lactante o cólico infantil se sabe que es un síndrome complejo benigno y multifactorial, que suele remitir a los 3 o 4 meses.
Supone una fuente de elevado estrés y ansiedad para las familias, debido a varias causas: llanto inconsolable del bebé que dura horas y horas, desconocimiento de las causas y el tratamiento, bombardeo de información de parte de amigos, familiares, profesionales,..con diversas y distintas técnicas,.. Con todo ello, las familias se encuentran en una vorágine de información y a su vez falta de solución.
Las Guías de Urgencias Pediátricas describen este cuadro como aquel en el que bebés sanos sufren “episodios de llanto de más de tres horas al día, durante al menos tres días en la misma semana", en las últimas horas del día o primeras de la madrugada, cuyos signos y síntomas son:
- Irritabilidad excesiva
- Llanto difícil de calmar
- Encogimiento de piernas
- Abdomen distendido, tenso y timpánico a la percusión
En estos casos, los fisioterapeutas pediátricos realizamos una evaluación completa del bebé que incluirá una exploración física (auscultación, observación de movimientos generales,..), así como una entrevista clínica para cuantificar la severidad de los cólicos, y así determinar si el bebe puede mejorar con fisioterapia o no.
El tratamiento normalmente consistirá en:
- Terapia manual: Aplicando con las manos, técnicas muy suaves y delicadas sobre la cabeza y el cuerpo del bebé. Se consigue localizar y liberar las zonas de tensión o bloqueo. Todo ello creando un entorno de seguridad y confianza para el bebé y la familia.
- Consejos y recomendaciones: porteo, manejo del bebé durante las crisis para calmar el llanto y aliviar las molestias del bebé.
Irritabilidad y nerviosismo
Puede que después de leer esta información pienses que la situación de tu bebé no coincide exactamente con el cuadro clínico de cólicos del lactante.
En ocasiones la inmadurez del sistema nervioso del bebé puede hacer que exista una tendencia a un estado más o menos permanente de irritabilidad y nerviosismo. Una dificultad del sistema nervioso para descartar impulsos aferentes puede llevar a una sobrecarga sensorial, dando lugar a un estado de agitación e irritabilidad.
En estos casos el hecho de tener además una disfunción a nivel de la columna vertebral contribuiría enormemente a esta sobrecarga sensorial.
Estas disfunciones cráneo-cervicales muchas veces suelen tener origen en el parto. El parto es en sí una circunstancia muy traumática para la cabeza y el cuello del bebé, debido al espacio ajustado para el paso por la pelvis de la madre, añadido al hecho de que la cabeza debe girar para poder salir ajustándose a la morfología de la pelvis de la madre. Todo ello se complica a menudo por partos muy prolongados, o excesivamente cortos, donde las fuerzas de presión del útero son muy grandes. También en los que ha sido necesario el uso de fórceps u otro instrumental.
Los niños con disfunciones cervicales y craneales, a menudo no toleran estar acostados y tienen que ser llevados encima hasta que se duermen, momento en el que las familias tratan de dejarlos en la cuna con pánico a que se despierten. Una vez dormidos, los niños están inquietos, se mueven sin parar en la cuna. A menudo se quedan en una postura muy característica, con la cabeza muy forzada hacia atrás o hacia un lado (en forma de coma). Se despiertan mucho, llorando y hay que cogerlos para calmarlos.
En cuanto el bebé recibe un correcto tratamiento manual está mucho más calmado, le cuesta menos dormirse, se despierta menos y los padres lo encuentran mucho más feliz. El tratamiento puede por fin traer al bebé y a la familia algo de paz.
Fisioterapia en la lactancia
Desde la Fisioterapia podemos ayudar cuando hay dificultades en la lactancia que se pueden manifestar con dolor cuando el bebé mama, aparición de grietas, mastitis, sensación de que el bebé "se pelea" con el pecho cada vez que va a mamar, se atraganta cuando mama, etc.
Como profesionales de la salud especializados en lactancia materna podemos darte recomendaciones y consejos acerca del posicionamiento del bebé más idóneo, de cómo debe ser el agarre, de cuáles son las señales de hambre de tu bebé...
A veces no basta con estos consejos y es necesario realizar una evaluación completa del bebé para valorar si existe:
- Dificultad para girar la cabeza de forma completa hacia ambos lados.
- Dificultad para posicionar la lengua de forma correcta durante la succión debido a la existencia de frenillo sublingual, disfunción de la musculatura de la lengua...
- Dificultad en la sincronización del mecanismo de respiración-succión-deglución.
- Excesiva tensión muscular en cuello y nuca que puede alterar la postura aumentando el patrón extensor (el bebé tiende a llevar la cabeza y/o el cuerpo hacia atrás)
En estos casos, el tratamiento con terapia manual y la estimulación sensorial y postural temprana va a ayudar a mejorar la lactancia. En el caso de bebés prematuros con déficit de desarrollo en la musculatura de la succión será además necesaria la intervención con técnicas de reeducación orofacial (ejercicios para boca, lengua, paladar, etc.).
